Recomendaciones de ejercicio físico durante el cáncer
Son varios los beneficios que han sido demostrados sobre la práctica de ejercicio físico durante el proceso oncológico por lo que, aunque te sientas cansado o nunca lo hayas practicado y te pueda parecer que ahora no es el mejor momento para empezar, te recomendamos que sigas leyendo.1, 2
Aunque te sientas cansado y sin energía y la idea de hacer ejercicio físico te parezca incompatible con tu situación, numerosos estudios en personas con cáncer han demostrado que el ejercicio físico puede mejorar la fatiga producida por los tratamientos del cáncer (quimioterapia, radioterapia, etc.) y tiene un impacto positivo en la calidad de vida y la supervivencia de esta enfermedad1-2.
Antes de empezar, es importante conocer la diferencia entre actividad física y ejercicio físico. La actividad física es cualquier movimiento de los músculos que genera un gasto energético (caminar, ir en bicicleta, subir escaleras, etc.). En cambio, nos referimos a ejercicio físico cuando el movimiento muscular está planificado y estructurado en series y repeticiones, con el objetivo de provocar un esfuerzo para mantener o mejorar el estado físico de la persona (abdominales, sentadillas, uso de gomas, etc.)1.
*El ejercicio físico puede disminuir la inflamación en tu organismo provocada por el cáncer y los tratamientos, mejora la fatiga y permite que puedas llevar a cabo con más facilidad las actividades de la vida diaria2.
* “Sé activo”, márcate pequeños retos como caminar ≥ 10.000 pasos al día y evita el sedentarismo (≤ 5000 pasos al día)1.
Según la etapa del cáncer en la que te encuentres, las recomendaciones de ejercicio físico son diferentes1. La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) ha realizado las siguientes recomendaciones de ejercicio físico con resultados positivos en los estudios en pacientes con cáncer1.
- Etapa de tratamiento de quimioterapia o radioterapia
- Ejercicio cardiovascular: caminar, correr, ir en bici, spinning durante 20-35 minutos 3 días por semana con una intensidad adaptada a las necesidades de cada persona. Se debe evitar la natación si presenta heridas o irritación piel. En cualquier caso, recomendamos que consultes con tu médico.
- Ejercicio de fuerza: yoga, pilates, gomas elásticas, en 2 rondas de 10 repeticiones 2 días a la semana (adaptado a cada persona).
- Ejercicio “stretching” o de estiramiento: yoga o clases de “stretching” para trabajar todo el cuerpo con estiramientos pasivos de 30 segundos de duración por ejercicio. Evitar zonas de radiación y parar cuando sientas dolor.
- Etapa de curación del cáncer
- Ejercicio cardiovascular: caminar, correr, ir en bici, spinning, natación durante 30-40 minutos 3 días por semana con una intensidad moderada o elevada dependiendo de tu situación previa.
- Ejercicio de fuerza: yoga, pilates, gomas elásticas, circuitos de fuerza con máquinas, etc., en 2 rondas de 10 repeticiones 2 días a la semana con una intensidad moderada o elevada dependiendo de tu situación previa.
- Ejercicio “stretching” o de estiramiento: yoga o clases de “stretching” para trabajar todo el cuerpo con estiramientos activos o pasivos de 30s de duración por ejercicio.
*El ejercicio cardiovascular o también conocidos como aeróbico, es aquel que implica grandes grupos de músculos y que se realizan, principalmente, con desplazamientos. Por ejemplo, correr, natación, ciclismo, baile, etc. Los ejercicios cardiovasculares ayudan a mejorar la función cardiaca y pulmonar, reduciendo el riesgo de tener enfermedades del corazón, derrames cerebrales y otras enfermedades vasculares3.
*El ejercicio de fuerza es aquel en el que se tiene que superar una resistencia varias veces. Esta resistencia se crea con la ayuda de un objeto, como por ejemplo la cinta elástica o nuestro propio cuerpo. Los ejercicios de fuerza ayudan a mejorar la fuerza física, el equilibrio y evitar la pérdida de músculo3.
*El ejercicio flexibilidad ayuda a mejorar el funcionamiento de las articulaciones. Se practica siempre después de un entrenamiento, para relajar los músculos3.
Coméntalo con tu médico o profesional de la salud de referencia. Él te orientará en cuanto al ejercicio físico más indicado para ti en cada momento.
Referencias:
1. Pollán M, Casla-Barrio S, Alfaro J, Esteban C, Segui-Palmer MA, Lucia A, et al. Exercise and cancer: a position statement from the Spanish Society of Medical Oncology. Clin Transl Oncol. 2020;22(10):1710-1729.
2 - 2. Fabi A, Bhargava R, Fatigoni S, Guglielmo M, Horneber M, Roila F, et al. Cancer-related fatigue: ESMO Clinical Practice Guidelines for diagnosis and treatment. Ann Oncol. 2020;31(6):713-723.
3 - 3. Torralba Y, Martí F, Serrahima A. Guía práctica: ejercicio físico en el tratamiento del cáncer. Información para pacientes, familiares o cuidadores. Instituto Clínic de Enfermedades Hematológicas y Oncológicas (ICMHO), 2020. Disponible en: https://www.researchgate.net/publication/344098027_Guia_practica_ejercicio_fisico_en_el_tratamiento_del_cancer_Informacion_para_pacientes_familiares_o_cuidadores.
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